Pulcro en el Lenguaje; solo en eso.

cabacote


La sencillez del lenguaje y la exactitud de lo expresado, es la base fundamental, para un buen orador o un narrador, es decir, mientras mas diáfanas sean las palabras, al momento de decir las cosas, mejor será el entendimiento y la comprensión del receptor del mensaje. Permítanme robar, o plagiar, alguna conceptualización de este punto, tan bochornoso para mí, porque me da hasta pena, hablar o expresarme como lo estoy haciendo en estos momentos, y para no parecer grosero en mi expresar prefiero citar a los que si saben de estas cosas.

Cito:
“Desde la Antigua Grecia el poder de la palabra, es conocido y valorado por todos. Pero ¿es solamente la palabra la herramienta que nos convierte en buen orador? La respuesta es no. La comunicación no verbal es tan o a veces más importante que la palabra misma.
Para que el tema quede claro, uno de los estudiosos más importantes que tiene esta disciplina, Albert Mehrabian, estudió cuál es el impacto total de un mensaje y los resultados fueron más que interesantes. Ese impacto es verbal en un 7 % (sólo palabras), vocal en un 38 % (tono de la voz, matices y otros sonidos) y no verbal en un 55 %. Por otra parte, otro teórico, Ray Birdwhistell descubrió que el componente verbal de una conversación cara a cara es menos del 35 % y que más del 65 % de la comunicación es de tipo no verbal.

Todo el andamiaje de gestos, posturas, miradas y actitudes que hacemos cuando nos comunicamos emiten un mensaje que nuestros interlocutores decodifican en forma inmediata, a veces consciente y generalmente en forma inconsciente, a través del denominado “sexto” sentido. Y decimos que a veces es consciente porque el avance de los medios de comunicación, los cursos de oratoria que se dictan en distintas instituciones y la difusión de estos temas por medio de internet, hace que cada vez más nuestros interlocutores estén más al tanto de estos temas y sepan decodificar el lenguaje corporal.
De acuerdo a este tipo de investigaciones, podemos sacar una conclusión rápida: la comunicación no verbal puede ser nuestro mejor aliado o nuestro peor enemigo”.

Ahora en este momento, le está hablando, este plebeyo infeliz, analfabeta de cuanto pueda significar, el poder que pueda tener, “El poder de la oratoria o “El arte de hablar en público” o cualquiera de esas técnicas sofisticadas, para envolver al publico de un espacio cerrado, podríamos llamarlo escenario.

Lo que si me gustaría saber y esto se lo sabría agradecer a todos los Revolucionarios que me han criticado, mi manera muy particular, de percibir y de comunicar, mis pareceres. Yo solamente la preguntare con muchísimo respeto lo siguiente:

¿Nos servirán para algo, estos conocimientos sobre el manejo y la aplicación de las técnicas sobre el poder de la oratoria, al querer defender la patria?

Si llegado el momento cumbre de nuestra Revolución, y nos vemos en la necesidad de afrontar, un ataque de algún país invasor a nuestra patria, y no se me sale una atroz y procaz; mentada de madre. Juro por dios que si salgo vivo de esa hazaña, asumir con religiosa disciplina, el estudio de las técnicas del poder y el arte de la oratoria.

Mientras ese momento llega, permítanme seguir siendo el eterno MARGINAL que siempre he sido, y solo pido su disculpa si alguna vez se me llegara a escapar un insignificante ¡coño! O ¡no me jodan!

¿Los de la CIA conocerán de estas cosas?

Atentamente.

El Marginal de la escritura popular

JESÚS CHUA ESPINOZA